Ezequiel Brahim: varias pasiones, mucho talento

“Uno llega a ser grande por lo que lee y no por lo que escribe”, era una de las frases de cabecera del genial escritor argentino Jorge Luis Borges. También el autor de Ficciones y El Aleph entre tantas obras notables solía decir: “Que otros se jacten de las páginas que han escrito; a mí me enorgullecen las que he leído.”

Elijo estas reflexiones de Borges ya que representan a Ezequiel Brahim por dos grandes razones; el destacado atleta lobense es; un gran lector y además conoce mucho la obra borgeana.

Varios ingredientes definen al deportista.

Brahim es Atleta, periodista, escritor, locutor. Su capacidad lo puede llevar a estar corriendo en las montañas del sur argentino, en las pistas del Cenard o a relatar los acontecimientos de una gran carrera atlética de calle, pero tiene una ventaja que lo diferencia del resto; la adrenalina que vive en los puestos de vanguardia de una carrera, luego la describe con gran maestría en sus notas periodísticas que no tienen desperdicio alguno.

Capaz de correr en diferentes distancias con grandes tiempos, todo eso que vive con pasión en las pistas de atletismo o en las duras calles luego lo traslada con una prosa cuidada, sobria y elegante a las páginas de La Nación, Revista Brando, Página 12, ADN Lobos y La Palabra de Lobos.

Sus notas son siempre una invitación a lecturas minuciosas y son objeto de grandes elogios. Basta con leer alguna de ellas, como la que escribió sobre la disputa entre keniatas y etíopes, un trabajo comparativo estupendo entre dos naciones potencias del atletismo mundial, la nota sobre Viviana Chávez cuando clasificó a los Juegos Olímpicos de 2016; una historia conmovedora del interior profundo de San Juan o el trabajo de investigación que hizo para la Revista Brando sobre carreras clandestinas por apuestas millonarias, en la cual se internó en ese submundo para poder dar testimonio de lo que allí sucede.

Una nota que le hizo al atleta de Kenia Julius Rono, ganador de la edición 2016 de los 10k Rotary Lobos, titulada “Pasar hambre me hizo fuerte”, donde describe la realidad dura de África, es otra de sus tantas aclamadas publicaciones en el diario fundado por Bartolomé Mitre hace 150 años y en el cual Brahim deja su sello en cada artículo sobre atletismo.

Brahim no deja dudas. Podés estar de acuerdo o no con él, pero sus comentarios, aportes y escritos nunca pasan desapercibidos. Es más, cuando escribe sus notas tienen tal visibilidad que sus entrevistados han terminado en un programa de televisión o como el caso de Belén Casetta, retornando al país luego de estar varada por la pandemia tras un viaje al exterior. Ezequiel con su nota de La Nación puso el tema en la agenda. Sus notas siempre terminan ayudando o dando visibilidad a sus entrevistados.

Su mentalidad es la de un deportista que jamás se rinde y además su fortaleza mental es admirable. La vida lo golpeó durísimo cuando en el 2006 en un accidente de tránsito sus padres Gustavo y Silvia fallecieron y un muy joven Ezequiel debió ponerse al frente de lo que su familia administraba. Más cercano en el tiempo, en Noviembre de 2018 le tocó perder a un ser muy querido como Horacio Zabalo, su tío y confidente. Ezequiel aguantó los golpes con mucho coraje y siempre supo salir adelante con determinación.

Su entrenador, Ezequiel Morales, notable atleta lobense que reside en Brasil nos comenta:

“Ezequiel Brahim es una persona muy dedicada cuando tiene un objetivo bien claro. Siempre va detrás de sus metas, trabajando diariamente con responsabilidad. Se propuso bajar de peso y a partir de ahí su motivación fue en aumento, de a poco fue corriendo más y más, después se propuso correr más rápido, bajar tiempos y así día a día se fue colocando nuevos objetivos que lo desafiaban. La consecuencia de eso fue una mejora en sus tiempos y eso lo movía a entrenar siempre con más ganas.”

Esas ganas de superarse lo han posicionado en la actualidad como uno de los dos mejores atletas de Lobos siendo además un permanente animador de las diferentes competencias donde participa. Morales continuó su testimonio afirmando: “Lo más fuerte de Brahim es su mentalidad y cuando tiene un objetivo claro hace todo lo necesario para lograrlo siempre con alta motivación”.

Ezequiel Brahim ha logrado superar dos récords en Lobos en media maratón y en maratón. En la primera distancia se quedó con el récord que ostentaba Juan José Rusconi en Agosto de 2019 al cruzar la meta en 1h10m51s y en la distancia de 42Kms y 195 metros en Septiembre del mismo año tras correr en 2hs34m26s para quebrar la marca de Daniel Rodríguez obtenida en 1996.

También se ha dado el gusto de ganar la tradicional prueba Uniendo Pueblos, el “Dakar de a Pie”, que cada Enero organiza en Empalme Lobos el Club Rivadavia. Ha sido ganador en la modalidad de posta mixta con Mariana Mendiburu y en la posta masculina ha ganado con Fernando Belossi, un gran compañero de entrenamiento y amigo de Brahim.

Belossi fue muy elogioso a la hora de referirse a Brahim: “Nos conocemos desde chicos, fuimos compañeros en la primaria y en los últimos dos años de secundaria, años más tarde nos cruzamos en el Parque Municipal. Los dos teníamos el mismo objetivo, bajar de peso. A los 3 o 4 minutos, cuando nos cruzamos por segunda vez me dijo -¡venís bien eh!- no solo me había tomado el tiempo, sino que en su mente que va a mil por hora con los números, sacó el promedio de la vuelta al parque, hizo una proyección de en cuanto tiempo podría hacer los 100m, 5k, 10k etc. Al finalizar el trote ese día, en la mesa, al lado de la cancha de bochas me propuso trotar juntos 3 veces por semana, ahí empezó todo: recorrimos miles de kilómetros juntos, miles de tardes compartidas, alentándonos uno al otro, con lluvia, con piedra, contra el viento, de noche y de día….”

Belossi recordó una de las tantas anécdotas que tiene con Brahim: “Habíamos entrenado muchísimo para una carrera, los cupos se agotaron muy rápido y quedamos afuera, pero él quería correr si o si, entonces organizó para el mismo día, una carrera para 3 corredores, Octavio Chiodo, él y yo, en el velódromo del parque; hizo un croquis con todas la vueltas que teníamos que dar para hacer 10k, saco todas las cuentas, consiguió un acompañante en bici para cada uno que fuera con el cronómetro cantando parciales, y así fue luego de la carrera de bicis largamos, y aunque el circuito no era certificado igual bajamos nuestro tiempo.”

Por último ya emocionado Belossi sentenció: “Es difícil describir a alguien que querés tanto, no alcanzan las palabras, muy buena persona, transparente, honesto, generoso, solidario, nunca imaginé que podíamos llegar a ser amigos y hoy es uno de mis mejores, y le agradezco que haya creído en mi, por cada palabra de aliento, por hacerme dar cuenta que yo también podía.”

Son muchas las voces que se suman a la hora de opinar sobre este talentoso deportista de Lobos que a los 37 años se viene sosteniendo en el tiempo y es todo un atleta consolidado con más de 80 podios en su haber y más de 40 medallas de primer puesto en su pecho.

Cuando hablo de varias pasiones, me refiero a leer, escribir, correr, entrenar, hacer entrevistas y hasta volar, porque Brahim es además un asiduo visitante del Aeroclub de Lobos donde se da el gusto de ser piloto de pequeñas aeronaves. El rasgo más distintivo de Brahim es su espíritu de mejora continua, ya que cuando emprende algo, lo hace con mucho rigor, buscando hacerlo siempre de una manera muy seria y responsable.

Ariel Ferreira, Director de Deportes de la Ciudad de Lobos y atleta también, nos define a Brahim con estos conceptos: “Lo conozco desde 1997, ese año fue medalla de plata de los Torneos Bonaerenses en Mar del Plata. Compartimos muchos entrenamientos. Es una persona muy formada. Es muy instruido. Ha leído mucho y siempre sigue preparándose. Tiene una forma de ver la cosa muy particular. Es un obsesivo. En cada cosa que hace, cada cosa que encara y se propone, no lo hace como un pasatiempo, siempre busca hacerlo lo mejor posible, cada vez más perfecto. En atletismo y a la hora de escribir es igual y también en otras actividades.”

Ferreira no tiene dudas a la hora de referirse a Brahim: “Ezequiel no juega, Ezequiel compite. Cuando corres, cuando haces una broma, en todo. Siempre pregunta todo para saber más. El encara la amistad como encara el resto de sus cosas. Te exige. Si lo hace es porque te respeta. No podes salirle con una tontería porque si te pregunta algo, no podes decirle algo para salir del paso porque él te presta mucha atención y está preparado para cada conversación. Es honesto entrenando, cuando trabaja y cuando escribe. Cuando está convencido de algo es muy difícil hacerle cambiar de opinión. Su obsesión, el hecho de ser testarudo, su capacidad de resistencia al sufrimiento lo ha hecho junto a Luis Molina el atleta más sobresaliente de Lobos. Es muy duro psicológicamente y logró correr debajo de los 32 minutos a pesar de haber comenzado tarde a entrenar. Hablar de Brahim como Director de Deportes para mi representa un orgullo, como Luis Molina, Valentina Luna y otros que se destacan a nivel nacional”

Admirador de su tía Raquel Brahim, otra destacada deportista lobense, ella ha sido una referencia para él y además una consejera en la vida.

En lo personal, he tenido muchas charlas con Brahim y desde la primera vez que lo vi correr en una prueba de FILA en la Ciudad de Buenos Aires hace varios años, donde sorprendió con un gran tiempo para una carrera de calle, llena de laureados corredores de élite, me di cuenta que lo suyo iba en serio.

Capaz de convocar ciento de atletas a una carrera, es una persona muy hábil a la hora de tejer relaciones sociales y enriquece el día a día de quién está a su lado. Crítico agudo a la hora de marcar un error, es también una persona muy justa a la hora del elogio.

Multifacético. Empresario, buen administrador, es un apasionado de lo que hace. Ama el mantecol pero se lo permite muy escasamente porque sabe que para estar en sintonía con el deporte no puede relajarse en ningún momento. Admira a Borges, a Caparrós, a Leila Guerriero a quien ha entrevistado y por supuesto a Fontanarrosa, cuyos cuentos disfruta mucho.

En ADN Lobos comparte horas de conocimiento con Emilio Cicco, destacadísimo periodista y redactor.

Ezequiel Brahim es sin dudas un destacado referente del deporte lobense que trasciende la geografía de la ciudad y sigue haciendo camino. Mientras aguarda el regalo más lindo de la vida, ha disfrutado y sufrido por igual, carreras en la calle, en la pista, en la tierra y en el asfalto. Lo ha hecho muy bien en la montaña y se ha dado el gusto de ganar en Europa y de entrenar en Brasil al amparo de las bellas playas de Ipanema, las cuales a ritmo de bossa nova inmortalizaron Vinicius de Moraes y Antonio Jobim.