Descanso para el Gran DT
La noticia sacudió al mundo efileño. Tres días después de haber perdido la final ante Deportivo Coreano, Fernando Marro comunicó la resolución que tenía en mente desde hace un tiempo: dejó de ser el entrenador de la Primera y se tomará un descanso alejado del banco de suplentes, con el fin de reponer energías.
La decisión sorprendió a todos, no sólo a los jugadores sino también a los dirigentes. Hasta el momento, Teti había dirigido en cuatro torneos al Lobo, consiguiendo un título, dos subcampeonatos y un cuartos de final. En total, dirigió al equipo en 53 partidos, ganando 31, empatando 12 y perdiendo en 11, con 85 goles a favor y 50 en contra. Las estadísticas muestran que el ciclo de Marro en EFIL fue sumamente positivo, pero su cabeza y sus ganas ya no son las mismas.
“Tengo sensaciones encontradas. Me crié acá y amo a este club. Estaba muy cómodo y precisamente a eso no quería llegar, a no tener una motivación y a exigir al plantel más de lo que se exigió, porque la gente no tiene ni idea de lo que fueron estos dos años en los que EFIL estuvo siempre ahí arriba“, comentó, y agregó: “Esta fue la tercera final consecutiva y el desgaste es muy grande. La idea es tratar de aflojar y ver si queda alguna segunda vuelta para más adelante. Por eso uno trata de quitarle presión a ésto y creo que queda un plantel excelente, que es lo más importante“.
Como en cada receso futbolístico, su teléfono será uno de los más solicitados. Humilde y de ideas firmes, su curriculum hace despertar el deseo de varios por tenerlo en sus clubes. Sin embargo, él mismo se encargó de despejar cualquier tipo de dudas con respecto a alguna oferta de otra institución: “No me llamó nadie. Quiero descansar y darle tiempo a la familia. Uno tiene al fútbol como prioridad porque lo siente y lo vive así, pero hay gente que nos rodea y nos quiere y uno también tiene que dedicarle tiempo. No hay ningún tipo de especulación, ni de dinero, ni de peleas ni nada, simplemente un descanso que viene bien y ver lo que se hace más adelante“.
En Febrero de 2014, se presentó como nuevo DT de EFIL y de entrada dejó en claro sus intenciones: ser campeón con el club que lo vio nacer. Motivador por naturaleza y sabio cabeza de grupo, Fernando supo potenciar a un grupo que, hasta el momento, siempre se había quedado en la puerta de los primeros puestos. Sin apartarse de la idea base que tenía la dupla técnica saliente (Amadei-Ardiles) y mucho menos de la que inició Brondo 10 años atrás, le puso su sello distintivo al plantel y, aunque le llevó tiempo y tuvo que superar varios obstáculos, lo transformó en un equipo existoso.
“El balance de los dos años es positivo. Yo siempre digo que me gustaría tener un equipo metido en semifinales todos los campeonatos y en EFIL los últimos tres torneos lo logramos. A mi criterio, hemos alcanzado un nivel de fútbol de lo mejor que me ha tocado dirigir y hasta jugar. Un grupo humano excelente. Son muchas cosas buenas que hacen que este grupo haya logrado lo que logró y que va a seguir a seguir logrando, porque yo no inicié nada, simplemente continué con lo que ya estaba y aporté lo mío“, confesó Marro con la sinceridad habitual que lo caracteriza. Y continuó: “Ahora ya hay un grupo consolidado y lo más importante es que se dieron cuenta que pueden ganar. Me duele dejar el club pero creo que es la decisión acertada“.
Cuando se lo comunicó a la CD, la respuesta inmediata fue intentar que revirtiera la situación. El protagonista de esta historia así lo explica: “Ellos querían que me quedara, que no importaban los resultados. Querían que me quede de por vida, que si fuese por mí que me quede a vivir. Lo entendieron bien aunque no todos lo compartan. Les agradecí enormemente pero uno trata de buscar motivación, ésto lo hago como si fuese la Selección Argentina, entonces creo que lo más conveniente era parar un poquito para volver a estar al pie del cañon y luego buscar conseguir cosas importantes“.
Si bien la decisión la tenía tomada desde hace un tiempo, Teti confesó que el apoyo recibido por parte del plantel lo hizo dudar. “Luciano Sabbatini y Pelito Bogliotti son dos de los referentes de este equipo y uno está acostumbrado a escucharlos, pero cuando te hablan Lorenzetti, Fortunato, Luz y los Moneta, por citar algunos de los que me llamaron, uno empieza a pensar si se está equivocando o no. Costó, dudé y lo pensé, pero espero no haberme equivocado“.
Se va a descansar Marro. Su salud le pasó factura en este último año y el estar alejado de la línea de cal por un tiempo le va a hacer bien. Como se lo manifestaron los dirigentes, tendrá las puertas de EFIL abiertas para un regreso. El compromiso y la dedicación con la que encara cada desafío es innegable y con esos pilares ha conseguido grandes resultados. En palabras de él, “creo que la pasión y la forma de trabajar es lo que le puedo dejar al club, lo demás ya lo sabían todo“. “El respetarse, respetar a una idea y cuidarse, y si a alguno le dejo algún concepto futbolístico bienvenido sea. El convencimiento de que pueden, por ahí eso puede llegar a ser un pedacito mío“, cerró el Gran DT.
Opinan sobre él:
Marcelo Bogliotti: “Profesionalizó a EFIL en una liga amateur al punto de jugarle de igual a igual a cualquier equipo. Sacó lo mejor de cada uno. Nos enseñó mucho y va a ser muy difícil reemplazarlo”.
Luciano Sabbatini: “Muy laburante y detallista. Apasionado del fútbol y de todo lo que hace. Motivador nato, muy inteligente, no sólo en lo futbolístico, también en el armado del grupo. Convencido de lo que hace. Un DT ganador y humilde. Y lo más importante, una gran persona”.
Juan Manuel Badaloni: “Le devolvió el protagonismo a EFIL en Primera. Supo capitalizar el trabajo realizado en divisiones inferiores consolidando a muchos jugadores del club en el plantel superior”.
Mariano Lorenzetti: “Nos enseñó a ganar, a querer hacerlo siempre y no conformarse con competir nada más. Va a dejar una marca en nosotros”
Ignacio Mattiuz: “Sacó lo mejor de cada uno, consolidó un grupo e hizo que cada uno se convenciera de que los objetivos se consiguen con perseverancia, compañerismo, confianza y pasión por este deporte”.
Lorenzo Turdó: “Motivador nato. Vive el fútbol como pocos y tiene la habilidad de lograr transmitírselo al grupo. Le agregó a un equipo rico de cualidades la mentalidad ganadora y el sacrificio por el logro de los objetivos”.
Pablo Ardiles: “Logró plasmar en la cancha la mejor versión de un equipo de Primera división que haya representado a EFIL. Motivador, práctico, conocedor de lo propio y de los rivales, pero sobre todo un tipo con códigos de convivencia grupal y humana muy marcados. Absolutamente positivo su aporte al club”.
Rafael Amadei: “El técnico más profesional y dedicado de la Liga Lobense de Fútbol. El mejor”.