Señores de las cuatro décadas
Los Naranjos se metió nuevamente en la final de Primera División de la Liga Lobense de Fútbol donde definirá mano a mano con Madreselva quien es el nuevo campeón.
La ilusión naranja tiene sólidos argumentos y el sueño que persiguen es liderado por los «Señores de las cuatro décadas» …
En El Autógrafo te contamos quiénes son y cómo piensan…
*Por Mauro Casal
«No le quite años a su vida…Póngale vida a los años, que es mejor…» dice una popular canción del guatemalteco Ricardo Arjona y en el club de la calle Sarmiento parece que les sienta bien ese tema.
Los Naranjos va por la gloria, la misma que se le escapó por muy poco en el torneo anterior y cuenta con un equipo muy serio, muy fuerte desde lo grupal, con excelentes jugadores en todas sus líneas y con doble liderazgo, el que ejerce, por un lado, su DT Juan José «Mane» Arias desde afuera de la línea de cal y el de los Señores de las cuatro décadas desde dentro del campo, que son un grupo de muy vigentes futbolistas, que superan los 40 años y siguen desafiando el paso del tiempo.
Franco Brun, Claudio Bustos, Gabriel Arévalo Higa, Carlos Francisco Blasco y Claudio Cagliari son los lugartenientes de la ilusión del equipo que supo poner en la mesa de los grandes el recordado Pepe Chiarelli y que hoy sustentan con su trabajo muchos entusiastas como Pertino o Di Paola.
El que vio la infartante definición por penales de Los Naranjos con Alumni todavía estará aplaudiendo a los arqueros Gruccio y Brun, que con voladas espectaculares le pusieron calor a la noche fría de sábado.
El Oso Brun, 43 años, no sólo es un arquero, con un largo recorrido en el futbol local, sino que es un showman, un artista del puesto, mezcla de arquero arrabalero con loco lindo, que es capaz de ganar un partido con un gol de media cancha o atajar cuatro penales en una serie de cinco, sacando del rincón más difícil cualquier pelota debido a su destreza y capacidad acrobática.
Quien no lo conoce podría pensar que ya no le da la nafta para tanta destreza, pero quien lo conoce mucho, como este cronista, que fue su compañero de cancha, no se sorprende porque Brun es capaz de descolgar una pelota bien alta, de meter una volada de esas que parecen sacadas de una filmación en cámara lenta o de atajar un mano a mano poniéndole el cuerpo y el corazón.
«Muy lindo lo que estoy viviendo, Mauro, es emocionante, no pude dormir, estuve eufórico, luego de semejante definición.» nos dice el arquero de Salvador Maria.
«Con este grupo de locos, me hice fuerte y me volvió el hambre de ganar, con cada partido que pasa me siento mejor.»
«Tener a Cati (Bustos) es una locura, lo que te habla y te motiva, lo mismo el Gallego (Blasco) que volvió en este torneo, todos jugadores viejos pero guerreros…Le dije a mis compañeros tratemos de empatar que en penales lo vamos a ganar…estoy re bien después de la cirugía.»
Brun durante la charla, destacó varias veces la labor de Gruccio que atajó también cuatro finales y las virtudes humanas del arquero rival además de sus compañeros.
Claudio «Cati» Bustos es el cerebro dentro de la cancha, quizás uno de los mejores jugadores que ha dado la Liga Lobense en los últimos 20 años. Lo que antes era gambeta y desparpajo, el caño al rival y la picardía, hoy es el pase profundo y pensado, la pared y el toque en el mediocampo para que su equipo descanse con la posesión de la pelota. Si hay alguien que trata con amor a la redonda, con 42 añitos es Claudio Bustos y además lidera, motiva, habla, guía y conduce. Cati nos cuenta….
«Soy un agradecido a la vida, la diabetes casi me lleva para arriba, Dios me dio otra oportunidad. Siempre tirando el carro para adelante desde donde nos toca. Tenemos un grupo de jóvenes y gente más grande. Lo vivimos como un pibe de 20, con la misma ilusión de cuando éramos chicos. Estamos con ganas, con emoción, con mucha adrenalina. La vida es hoy, es ahora, hay que pensar en lo que nos pasa en este momento. La vida siempre te regala, hay que dejar todo, te vas contento a tu casa.»
Es un deleite conversar con Cati, que nos regala frases maravillosas y tiene la energía del futbolista que recién comienza.
«El club es muy humilde, nos falta cancha, nos faltan cosas, lo retratan en una canción y es verdad, pero somos un grupo humano sensacional y sano. Al que le toca jugar, juega y al que no, tira el carro para adelante. El grupo está fuerte y unido. Este equipo tiene hambre, nos cuesta mucho todo, nos matamos entrenando y respetamos al rival, pero queremos la gloria deportiva, vamos a morir de pie, intentando dejar todo. No somos más que nadie, pero menos tampoco»
Cati, viene jugando finales hace dos años con Sebastián Rubano, dos con Provincial donde fueron campeones y van por la segunda final seguida con Los Naranjos.
Rubano, ese bravo jugador lateral o volante por la izquierda al que apodan Caniche, y que Cati define como jugador siempre de 7 puntos nos dice…
«Esta sería mi séptima final. Me tocó ganar 5 y perdí la última contra Provincial. Va a ser mi cuarta final seguida, tenemos la suerte con Cati de disputar finales desde hace dos años, siempre hemos sido compañeros en estos partidos decisivos. Muchas veces pienso lo difícil que es llegar a instancias finales y tenemos la suerte de venir jugando siempre una»
Rubano, que se suma a la charla con El Autógrafo agrega con confianza luego de la gran campaña y de haber ganado la zona …
«Creo que ya no somos un equipo al que quieren enfrentar. En el torneo pasado todos se pensaron que por jugar con Los Naranjos ya pasaban de ronda, sin embargo, fuimos siendo siempre un rival duro. Y este torneo lo afrontamos de esa manera. Queremos ser los protagonistas y que no sea un batacazo haber ganado. Los dos equipos llegan bien, será una final de detalles. Creo que lo principal será estar concentrados los 180 minutos, hacer partidos inteligentes. Sabemos del poderío de Madreselva, pero como equipo intentaremos neutralizarlos»
Por último, sentencia y cierra con este pensamiento….
«Creo que lo merecemos por la humildad, el trabajo en equipo, el grupo que tenemos que eso es lo más difícil de conseguir. Creo que ya lo demostramos el torneo pasado que con este grupo se puede llegar a una final y estoy convencido que nos merecemos esto que nos pasa porque tenemos mucha hambre de gloria»
Jugar con Madreselva una final no es algo nuevo para Cati Bustos, un jugador que ha sido emblema del rojinegro en el pasado…
«Jugar contra Madreselva es jugar contra mi barrio, yo me críe ahí, vi crecer a muchos chicos que juegan en diferentes categorías, muchos chicos que dirigí, yo soy muy respetuoso del club que me vio nacer, pero hoy estoy en Los Naranjos y me siento muy agradecido por la oportunidad que tuve en este club».
Con relación a los consejos a sus compañeros Claudio Bustos le comenta a nuestro medio…
«Yo siempre le digo a los chicos, que uno no es que sepa más que el más joven, uno lo vivió antes, son experiencias, uno sabe que de Cuartos de Final en adelante la pelota va a pesar un poquito más, que esta bueno equivocarse, es parte del ser humano, lo bueno es tener gente con experiencia que puedan acompañar el proceso de los más pibes y llevarlos siempre para adelante, cuando se caen ahí estamos para alentarlos. Uno debe jugar por el pibe que quisiera que su papa lo vaya a ver y no puede, debe jugar con el corazón, debe jugar por el que no está, el corazón debe nutrir al cuerpo para que este cuerpo no sea vacío».
Siguiendo con el análisis del finalista y su grupo de soldados de más de 40 años El Autógrafo converso con Carlos Blasco que estaba jugando en Segunda y Arias lo convocó y no le falló…
El Gallego fue un goleador tremendo siempre y una carta a la cual el club apostó a pesar de su larga ausencia en la Primera División. También con 43 años le aporta su experiencia y se refleja en su testimonio…
«La verdad tuve la suerte de ganar 3 finales con EFIL y 2 a Madreselva que fueron tremendas, a cancha repleta de gente, también la suerte de jugar 3 con Los Naranjos, la verdad no estaba en los planes jugar, mucho más después del último campeonato que salimos campeones con Los Naranjos donde terminé lastimado con operación de ligamentos y menisco, así que después de más de 4 años se dio la posibilidad de volver en Cuartos con San Miguel, fueron semanas de nervios y ansiedad.
Siempre hablamos con los pibes de dar todo sin importar, entender que sin prepararme para jugar en Primera, había metido 3 pretemporadas de alto nivel, 2 a 3 entrenamientos todas las semanas y sin importar nada porque no era para jugar, y todo fue llevando a saber que todo este tiempo me estaba esperando una despedida en una final premio a todo lo dado , y ahí estaré terminando dentro de una cancha donde merezco Mauro, gracias a Dios, a la familia que tengo, a todos los pibes que fueron el motor más que ayudarlos , ellos me estaban ayudando a mí , entiendo todo ahora como se dieron las cosas soy un agradecido, también con el cariño que me tratan los compañeros del equipo y la gente del futbol, los rivales me llevo palabras hermosas de cada uno de ellos, vieron que volví, y lo hice bien espero hacerlo mejor en la final, con 43 años que más pedir , solo agradecer… ojalá se dé un cierre perfecto, Franco , Cati , Gaby Arévalo, Claudio Cagliari, la verdad es tremendo que hagan todo lo que hacen es admirable de verdad…».
El Gallego Blasco fue compañero de Damian Gallo, el papá de Agustín Gallo, volante todo terreno de este equipo y jugador clave en la estructura de Arias, y cuando fue campeón en EFIL con Gabriel Arévalo, el joven Gallo ni siquiera había nacido. Hoy se disfrutan mutuamente con el placer para Blasco de haber jugado con padre e hijo.
Hablando de Gabriel Arévalo Higa, es quizás el caso más emblemático de los veteranos que han puesto a Los Naranjos nuevamente en una final.
A Arévalo, lo apodan paradójicamente El Chino, pero su apellido materno es de origen japonés, generando todo un entrevero geopolítico entre dos naciones que en el pasado tuvieron sus diferencias. Siempre amable y agradable al trato, cordial en sus formas, tiene el temple de aquellos antepasados suyos japoneses, que cultivan la serenidad, la paciencia y la perseverancia.
En la final pasada lo vimos emocionarse como si fuera su primera final y a los 45 años todavía aporta su encanto y experiencia con toda naturalidad.
Va a jugar su sexta final, fue campeón con EFIL con Sallustio como técnico. Emocionado nos cuenta….
«Las sensaciones están a flor de piel, por la misma edad, porque uno sabe que es muy difícil, llegar a una final parece muy lejano y este equipo va a repetir ese momento mágico contra un gran club como Madreselva. Es un momento muy especial para mí, entrenando mucho, muy feliz por las puertas abiertas por dirigentes, el cuerpo técnico, jugadores que me aceptaron con mi edad, estoy enormemente agradecido por sentir siempre ese cariño, por sentirme parte de este grupo y poder aportar algo en el juego y mucho en la palabra. Feliz de sentirme escuchado y respetado, algo que me parece muy valioso. Siento que la copa del afecto que vengo levantando hace dos años y medio en Los Naranjos vale mas que la copa deportiva. Este club me regalo nuevos amigos y le doy mucho valor a todo eso, tanto como a los viejos amigos que coseché en EFIL como Ospital, Rafa Amadei, Adrian Brancoli, Guillermo Hevia, Mariano Lorenzetti, Mariano Canchero, Lucas Diaz….
Me emociono en cada entrenamiento, en cada partido, disfruto cada pequeña cosa que me sucede luego de tantos años que yo había dejado y al volver y vivir todo esto, siempre estaré agradecido y emocionado. Este es un excelente grupo humano, con muy buenas personas, con mucha jerarquía individual, y se ha ido plasmando en la cancha, muy bien liderado por Arias y el grupo ha progresado en la unidad donde se potencio. Supimos sortear cortocircuitos y con nuestro Coach Ángel, él ha sido valioso para nuestro crecimiento, siempre con una palabra justa y necesaria para atravesar los diferentes momentos. Mucho de lo que estoy disfrutando es por la gente que abrió las puertas en este club y por todos aquellos que en mi paso anterior por EFIL me dieron una formación y una identidad deportiva. Soy un hombre de gratitud y me da paz agradecer»
El último guerrero y este si que lleva la lanza en cada jugada y el cuchillo entre los dientes, de toda esta muchachada de los Señores de las cuatro décadas es Claudio, «El Sopa», Cagliari…
Vaya uno a saber porque le dicen Sopa a un tipo que cocina unos asados de primera, es muy importante para el grupo y tiene la dureza de un acorazado alemán de la Segunda Guerra Mundial.
Cagliari no le teme a nada, le toque jugar, no le toque, aporta desde donde sea.
Nos ha dado su testimonio para darle un cierre a esta nota, con la amabilidad que lo caracteriza….
«Se disfruta mucho todo esto, con mucha tranquilidad, el día a día, la charla en el grupo con los chicos es hermoso que la gente te felicite en la calle por jugar una final a los 40 años. Tenemos un grupo de mucha experiencia, Chinito, Cati tienen un talento que a veces no lo encontraras en alguien más chico, con una madurez y una tranquilidad increíble para jugar al fútbol. Gallego Blasco se sumó también y cuando lo vimos entrar con San Miguel de Las Heras parecía que nunca lo habíamos dejado de ver jugar al futbol. Esta intacto, tiene una velocidad increíble, sabe ocupar muy bien los espacios, sabe donde lastimar al rival y Brun es un animal, sus atajadas hablan por si solas. Además, tenemos jugadores jóvenes con mucha calidad, entrega, sacrificio, le dan oxigeno al equipo, tienen una cabeza ganadora increíble.
Lo principal del grupo es la mentalidad ganadora, buen arquero, buena defensa, buenos volantes y delanteros y el banco acompaña y suma, No es solo un equipo de tres o cuatro individualidades. Por eso estamos en una nueva final. Es un partido hermoso para jugar, con un rival de mucha calidad, que te motiva para jugarle, tenemos muchas expectativas y vamos por la revancha del torneo pasado.»
Cagliari jugará su cuarta final con Los Naranjos, recordando aquellas finales con Independiente de Monte, con Dorrego por el ascenso y la anterior contra Provincial. Ahora va por la gloria ante el duro y siempre complicado Madreselva.
Sopa, es siempre frontal. No se guarda nada como en la cancha.
«Gracias por acordarse de los jugadores con menos prensa o sin prensa. Hay muchos jugadores silenciosos, de mucho trabajo en los clubes y no lo digo por mi pero siempre hay otros que son los que aparecen en la prensa, pero bueno el futbol también tiene estas cosas. Ojalá se nos de este campeonato, lo merecemos»
Podríamos seguir hablando mucho de Los Naranjos.
Esta nota honra a los mas veteranos, a los más 40, a los cuales Ricardo Campos, el excelente central del equipo y capitán de este plantel, se les acerca con timidez, pero algo de lejanía en sus treinta y pico, sin embargo es el resumen de un finalista que tiene jugadores muy parejos en su rendimiento y con muchos jóvenes talentosos que hacen del equipo de Arias un rival de mucho respeto.
Fernandez, Lamboglia, los Onetto, Gallo, Rangone, Villalba, el mencionado Rubano y hasta el Pulga Gigena que hoy esta lesionado hacen fuerza en este equipo que intentara dar el golpe a la mesa y llevarse el campeonato que se les escapo el torneo anterior.
Están preparados para competir, nadie les quitará la ilusión. ¿Se repetirá el 24 de Diciembre de 2016? La fecha no es la misma, pasaron casi 7 años, pero la ilusión, el Estadio y el rival son idénticos.
