¡Provincial Campeón! Empalme vibró con la final de la Liga

*Por Mauro Casal

Provincial se consagró campeón de la Liga Lobense de Fútbol tras imponerse en la tanda de penales por 5-3 luego de un atractivo 2-2 contra un Atlético de Roque Pérez que no pudo por muy poco obtener el tricampeonato, pero que sin dudas ha dejado su sello tras celebrar su tercera final consecutiva, consolidando un proyecto formativo con jugadores surgidos de su propia cantera.

Si el primer partido en Roque Pérez dejó sabor a poco, luego de un cero a cero pobre en jugadas, el partido de regreso fue otra cosa, fue más atractivo, tuvo goles, una expulsión temprana y la emoción final de los penales, que siempre son una instancia que combina dramatismo con tensión y emoción.

Provincial vuelve a coronarse tras aquel título de 2018 con Cepeda y tras aquel logro de 2007, equipo que comandaba Guillermo «Pelusa¨ Robaldi.

Precisamente el domingo apareció por la cancha Pelusa Robaldi, que no iba desde el 2007 a ver un partido de Provincial y su mística ganadora se trasladó a Luis Ghibaudo que logró cerrar un círculo de triunfos.

Luis Ghibaudo, con este título que se le había negado en el torneo anterior, logró la estrella que le faltaba a su propio palmarés- (conjunto de éxitos, méritos o victorias conseguidos) -. Fue campeón como jugador del club, como entrenador de Reserva y ahora como entrenador de Primera División.

En su testimonio post partido, se emocionó ante nuestro medio y recordó al equipo del 2002 ¨No podíamos faltar a una fiesta después de 20 años de ese título¨ expresó y además se quebró cuando recordó a Leandro ¨Galli¨ Robaldi, el notable delantero fallecido hace un tiempo en un accidente automovilístico. ¨Le pedí que nos ayudara desde allá arriba y la verdad que se portó…¨ y su voz se entrecortó y sus ojos se pusieron vidriosos, cubierto por las incipientes lágrimas de su testimonio emocionado…Agradeció a la familia y a la señora…¨nos bancan todos los domingos¨…

Ghibaudo nos contó que su idea era salir a buscar el partido, pero a los 25 minutos la expulsión de Benitez e instantes después un penal en contra, lo hizo recalcular ya que la situación era difícil en cuanto a tener que jugar con uno menos tanto tiempo y con el campeón enfrente dispuesto a aprovechar la situación.

¨Sacamos a Fausto Echevarría por un cambio táctico, pero supo entenderlo por el bien del equipo¨. Provincial tras la expulsión de Daniel Benítez, incluyó a Rubano por la izquierda y pasó a Barzezevski de central junto a Morey pasando a Vallejos al lateral derecho donde jugó un partidazo.

El partido fue cambiante. Un gran tiro libre de Petre desde la izquierda encontró a Lazzaro entrando al área chica para fusilar de cabeza a Dos Santos y establecer el 1-0 para Provincial.

Pablo Pesaresi el técnico de Atlético había advertido el domingo anterior que ese primer gol podía ser vital para quién lo convirtiera y, sin embargo, a pesar de estar marcado, la calidad individual de Lazzaro, el mejor jugador de la final, logró desestabilizar a la defensa.

Provincial mandaba en el resultado, pero la pelota la tenía Atlético que intentaba por los costados y trataba de hacer fluir el juego a través de Alejo Porta y de Vizio que nuevamente fue asfixiado por Claudio Gutiérrez que se le pegó como estampilla y le hacía el juego muy difícil al estratega de Atlético, quién a pesar de todo tuvo un par de situaciones de media distancia producto de su capacidad.

Kozicki de a poco empezaba a ser importante deteniendo algunos remates de Rolandi, muy activo en el primer tiempo especialmente.

A los 25 minutos Benítez se va expulsado por agresión a Mondinelli y a los 38 Rolandi de penal convierte el empate, luego de que Vizio ya asediara a Kozicki con dos remates previos en los minutos anteriores.

El penal despertó críticas del lado de Provincial. Speranza, el árbitro del partido que estaba muy cerca de la jugada no dudó en cobrar mano de Barzezevski, pero el defensor Azul relató a nuestro medio que la pelota no le da en el brazo y que cuando Speranza viera la imagen en la televisión se daría cuenta que no había sido penal.

Rolandi se encargó del mismo y fusiló al Tano Kozicki. Empate, gol y a repensar el partido.

Pesaresi pedía a sus dirigidos abrir bien la cancha y se preocupaba por perder las segundas jugadas, hecho que le marcaba a sus colaboradores.

En Atlético empezó a gravitar por la derecha Schiavi, uno de los mejores jugadores de la final del lado roqueperense.

En la segunda mitad, los roqueperenses se fueron a buscar el partido y si bien Petre inquietó de entrada con otro tiro libre, el que llega al segundo gol es Atlético de Roque Pérez.

Gran jugada de toques y pases cortos, pelota puesta en cortada para la llegada sorpresiva del lateral izquierdo Juan Mariano Millán y el zurdo con una definición casi de baby fútbol la acomodó contra el palo derecho de Kozicki.

El partido se ponía 2-1 para el bicampeón que parecía que tenía todo para llevarse por delante a Provincial. Un jugador más, un gol de ventaja y la posesión, ante un Provincial replegado y metedor que se veía obligado a esperar su oportunidad mientras su hinchada los alentaba.

Las dos hinchadas realmente fueron especiales y acompañaron en gran número a los equipos, dándole un clima hermoso a la final, con bengalas azules que le dieron un colorido increíble sobre todo en el ingreso de los equipos.

A los 15 minutos Petre manda de nuevo un centro al área donde Lázzaro se anticipa y cabecea. Era un aviso de lo que vendría.

Dos minutos después, la pelota cae desde la derecha al área de Atlético, el central Lucesoli la desvía y Dos Santos queda a mitad de camino por ese desvío con tanta mala suerte que encuentra a Lázzaro en el corazón del área, con el oficio del nueve y de palomita, a lo Pedro Poy en aquella final del 71 entre Central y Newell´s la manda al fondo del arco y desata la locura de los empalmeños.

SI bien quedaba mucho por jugar, Provincial se aferraba a esa chance de mantener la serie abierta y ganarlo de contra, con pelota parada o en los penales, donde tenía a Kozicki su as de espadas.

Provincial que parecía la iba a pasar mal, volvió a meterse en partido, Atlético no lo liquidó y la ansiedad y el nerviosismo, también la tensión y el miedo a perder se apoderó del juego.

Taborda en gran jugada y luego Vizio tuvieron la chance del triunfo, pero no pudieron convertir al igual que Schiavi en otra gran maniobra individual, mientras Provincial

apostaba a la pegada de Petre, el desparpajo de Vairo, luego reemplazado por Montiel y la capacidad goleadora de Lázzaro.

Entre cambios e interrupciones por foules el partido se fue apagando y Speranza decretó el final.

Llegó la instancia de penales y ahí Provincial se siente ganador. Es como esos boxeadores que saben que, aguantando los doce rounds de pie, ganará la pelea por puntos en las tarjetas.

Provincial tiene un arquero muy intuitivo que desde chico ha jugado torneos de penales por su barrio y no falló en sus remates.

Rolandi, que en el partido ejecutó con maestría, no pudo con Kozicki y ese penal atajado fue la mínima diferencia entre estos dos grandes equipos en la final tras dos empates en ambas finales.

El partido tuvo un protagonista inesperado. Claudio Ismael ¨Cati¨ Bustos, el eterno fantasista de 40 años, el que pone la pelota bajo la suela y no se la podes quitar, entró en los minutos finales para tirar un par de paredes y para darle el título a Provincial con un remate esquinado que mansamente se metió en el arco de Dos Santos y desató la locura de los hinchas de Provincial que desbordaron el Enrique Chiosso, otra vez testigo de una tarde emotiva de gestas deportivas, como aquella del 2002, como aquellas del 2018 y del 2007….Para alegría de Ghibaudo – padre e hijo, de Guzmán y seguramente desde el cielo, del Gallina Robaldi cuya imagen siempre está en Provincial.